AL FIN!
otro cuatrimestre...
atrás quedarán las penurias del estudiante para llegar a entregar los trabajos en forma...
ajajajaj
ni que fuera tan malo
(chavo?)
martes, 8 de julio de 2008
martes, 24 de junio de 2008
Sé blog, no más
Andy Warhol decía que en un futuro todos tendrían derecho a unos 15 minutos de fama, en algún momento el anonimato pasaría a un segundo plano para que, por fin, las personas comunes y corrientes lleguen a ser lo que siempre quisieron ser: conocidas, otras. Lo que Warhol no dijo era de qué manera podrían hacerlo. Ya lejos del artista, en esta la era informática y tecnológica, los blogs dominan el mundo cibernético en materia de diarios íntimos virtuales.
El blog tuvo su origen en los 90s y lo que poseía de novedoso era que cualquiera podía escribir lo que quisiera, cuando quisiera. Tenía como principal cometido transmitir información y emociones con una marca propia. Sin embargo, las personas siempre buscan una manera de interactuar y formar relaciones con otras con las que puedan compartir intereses. Para esto se pueden utilizar otros servicios que brinda la web que simplifican esta tarea para luego poder enmarcarse dentro de una comunidad y así saber que alguien efectivamente lee, comenta y critica las observaciones allí publicadas. Pero ¿una comunidad puede lograr transformar o cambiar el pensamiento o se utiliza como mero instrumento para hacerse conocido? Actualmente predomina en las comunidades de blogs los que se dedican a denunciar. Es el caso de un blog que simplemente se llama viajecomoelorto.blogspot.com que encierra una problemática actual del transporte público y que logra que la gente se identifique y que clickee sobre estos sitios cada vez más seguido. Al igual que estafadosportelefonica.blogspot.com o teleforrica.wordpress.com en donde muchas personas dejan sus denuncias y reclamos para que los que tengan los mismos problemas sepan donde concurrir para que sean escuchados.
Caso contrario el de weblogs.clarin.com/quiero-un-novio en el que una chica inicia una búsqueda casi mágica del príncipe azul y va reconociendo sus errores y prejuicios propios y ajenos. Pareciera que su búsqueda terminó, dejó de escribir y se despide melancólicamente, tal vez dándose cuenta de que los imposibles realmente existen. Sin embargo, logró que casi un millón de personas leyeran su diario íntimo y dejaran unos 700 comentarios por publicación. Particularmente esta chica, Lorena Bassani, 30 años, reconoce que es conocida por la gente, y que recibió muchas propuestas laborales, pero también reconoce que ese ciclo había terminado. Sus 15 minutos de fama habían concluido.
En contraste, otras personas deciden materializar sus blogs haciéndolos papel, más fácil: editan un libro. Se puede encontrar uno, “Buena leche”, de una autora que se hace llamar Lola Copacabana que cautivó con sus escritos subidos de tono. Cielo Latini cuenta cómo pasaban sus días de anorexia e intentos de suicidio. Bruna Surfistinha, brasileña y prostituta de profesión lleva 100 mil ejemplares vendidos de su libro “El dulce veneno del Escorpión”, donde revela sus intimidades y da consejos sexuales como una verdadera experta en el tema. Y la lista de libros continúa, personas que realmente querían ser escuchadas.
Pero, ¿se puede afirmar que los blogs democratizan y los que no son escuchados toman voz así como en el género periodístico de la crónica? Martín Caparrós, el cronista argentino, afirma: “También me interesa de la crónica su forma de descentrar la mirada periodística. El periodismo habitual mira hacia el poder. Para salir en las noticias, si no sos rico o famoso o rico y famoso o tetona o futbolista, la única opción es la catástrofe: distintas formas de la muerte. En cambio, la crónica trata de mirar hacia el resto del mundo, y eso es un gesto muy político.” Pero en el blog es diferente. Uno toma partido de lo quiere decir y quiere ser reconocido para lograr, si se busca, un cambio. Además de que tener un blog significa tener acceso a él, es decir, ya no se trata de personas que viven en el campo sin siquiera poseer una radio o TV, ni de describir un acontecimiento importante de un pueblito que a sus pobladores les da la mismo ser reconocidos o no.
Ahora hablamos de personas que quieren hacer de sus vidas algo público, buscando interactuar con los que tienen los mismos problemas, padecimientos, pensamientos. Y para ello se hace un trabajo de “boca en boca” o mejor dicho de “sticker a sticker” o de “graffiti a graffiti” como hace viajecomoelorto.blogspot.com que se autopromociona para ser escuchado, digo leído. ¿Realmente sirve? Resulta ser un medio más para que un grupo de gente, que tiene a alguien como líder, discuta. Es una nueva forma de protesta. Forma pasiva de hacerlo, sentados en un escritorio pero de manera efectiva. “Hago esto porque tengo la profunda convicción que podemos lograr cosas importantes.” Reza simplemente Candelaria en su perfil.
Y los links siguen y se pueden pasar horas y horas espiando a los demás, como voyeuristas pero con la certeza de que los bloggers buscan un intercambio recíproco, quieren que todos sean partícipes de las situaciones personales vividas, y conscientemente o no, quieren sus 15 minutos. Warhol estaría orgulloso.
Bibliografía
www.rollingstone.com.ar
www.webblogs.clarin.com
www.blogger.com
FRESÁN, Rodrigo, “Así habló Andy Warhol”, en suplemento Radar, Página 12, 19/9/04.
Moreno, M., “Escritores crónicos”, Radar, Página/12, Buenos Aires, 07/08/2005.
El blog tuvo su origen en los 90s y lo que poseía de novedoso era que cualquiera podía escribir lo que quisiera, cuando quisiera. Tenía como principal cometido transmitir información y emociones con una marca propia. Sin embargo, las personas siempre buscan una manera de interactuar y formar relaciones con otras con las que puedan compartir intereses. Para esto se pueden utilizar otros servicios que brinda la web que simplifican esta tarea para luego poder enmarcarse dentro de una comunidad y así saber que alguien efectivamente lee, comenta y critica las observaciones allí publicadas. Pero ¿una comunidad puede lograr transformar o cambiar el pensamiento o se utiliza como mero instrumento para hacerse conocido? Actualmente predomina en las comunidades de blogs los que se dedican a denunciar. Es el caso de un blog que simplemente se llama viajecomoelorto.blogspot.com que encierra una problemática actual del transporte público y que logra que la gente se identifique y que clickee sobre estos sitios cada vez más seguido. Al igual que estafadosportelefonica.blogspot.com o teleforrica.wordpress.com en donde muchas personas dejan sus denuncias y reclamos para que los que tengan los mismos problemas sepan donde concurrir para que sean escuchados.
Caso contrario el de weblogs.clarin.com/quiero-un-novio en el que una chica inicia una búsqueda casi mágica del príncipe azul y va reconociendo sus errores y prejuicios propios y ajenos. Pareciera que su búsqueda terminó, dejó de escribir y se despide melancólicamente, tal vez dándose cuenta de que los imposibles realmente existen. Sin embargo, logró que casi un millón de personas leyeran su diario íntimo y dejaran unos 700 comentarios por publicación. Particularmente esta chica, Lorena Bassani, 30 años, reconoce que es conocida por la gente, y que recibió muchas propuestas laborales, pero también reconoce que ese ciclo había terminado. Sus 15 minutos de fama habían concluido.
En contraste, otras personas deciden materializar sus blogs haciéndolos papel, más fácil: editan un libro. Se puede encontrar uno, “Buena leche”, de una autora que se hace llamar Lola Copacabana que cautivó con sus escritos subidos de tono. Cielo Latini cuenta cómo pasaban sus días de anorexia e intentos de suicidio. Bruna Surfistinha, brasileña y prostituta de profesión lleva 100 mil ejemplares vendidos de su libro “El dulce veneno del Escorpión”, donde revela sus intimidades y da consejos sexuales como una verdadera experta en el tema. Y la lista de libros continúa, personas que realmente querían ser escuchadas.
Pero, ¿se puede afirmar que los blogs democratizan y los que no son escuchados toman voz así como en el género periodístico de la crónica? Martín Caparrós, el cronista argentino, afirma: “También me interesa de la crónica su forma de descentrar la mirada periodística. El periodismo habitual mira hacia el poder. Para salir en las noticias, si no sos rico o famoso o rico y famoso o tetona o futbolista, la única opción es la catástrofe: distintas formas de la muerte. En cambio, la crónica trata de mirar hacia el resto del mundo, y eso es un gesto muy político.” Pero en el blog es diferente. Uno toma partido de lo quiere decir y quiere ser reconocido para lograr, si se busca, un cambio. Además de que tener un blog significa tener acceso a él, es decir, ya no se trata de personas que viven en el campo sin siquiera poseer una radio o TV, ni de describir un acontecimiento importante de un pueblito que a sus pobladores les da la mismo ser reconocidos o no.
Ahora hablamos de personas que quieren hacer de sus vidas algo público, buscando interactuar con los que tienen los mismos problemas, padecimientos, pensamientos. Y para ello se hace un trabajo de “boca en boca” o mejor dicho de “sticker a sticker” o de “graffiti a graffiti” como hace viajecomoelorto.blogspot.com que se autopromociona para ser escuchado, digo leído. ¿Realmente sirve? Resulta ser un medio más para que un grupo de gente, que tiene a alguien como líder, discuta. Es una nueva forma de protesta. Forma pasiva de hacerlo, sentados en un escritorio pero de manera efectiva. “Hago esto porque tengo la profunda convicción que podemos lograr cosas importantes.” Reza simplemente Candelaria en su perfil.
Y los links siguen y se pueden pasar horas y horas espiando a los demás, como voyeuristas pero con la certeza de que los bloggers buscan un intercambio recíproco, quieren que todos sean partícipes de las situaciones personales vividas, y conscientemente o no, quieren sus 15 minutos. Warhol estaría orgulloso.
Bibliografía
www.rollingstone.com.ar
www.webblogs.clarin.com
www.blogger.com
FRESÁN, Rodrigo, “Así habló Andy Warhol”, en suplemento Radar, Página 12, 19/9/04.
Moreno, M., “Escritores crónicos”, Radar, Página/12, Buenos Aires, 07/08/2005.
sábado, 21 de junio de 2008
Por ahora estoy entre dos temas para tratar en el ensayo: la no-ficción/crónica (las dualidades que pueda tener) y arte-transformación que lo tomaría por el lado de las vanguardias que quieren tomar partido políticamente como forma de cambio social.
Aunque buscando información en el mundo virtuel (googleando) saltó un: "Blog como motor cambio social" y me pareció bastante interesante plantear si realmente este nuevo medio serviría efectivamente para transformar.
Aunque buscando información en el mundo virtuel (googleando) saltó un: "Blog como motor cambio social" y me pareció bastante interesante plantear si realmente este nuevo medio serviría efectivamente para transformar.
lunes, 16 de junio de 2008
Cuentos, cuentos...
Es raro escribir un cuento. La pregunta que más me hacia era cómo debia empezar y cómo debia terminar. En unos de los cuentos ya sabía cómo quería concluir, aunque no signifique que me salga de la mejor manera. En otros cuentos, me iban saliendo las cosas a medida que escribía. Cosa contraria hay que hacer según Cassany, quién afirma que hay que planificar, redactar, examinar y reformular los objetivos, ir explorando el texto para plantearse, a través de todo el escrito, problemas continuamente.
Me acuerdo que había leído que Cortázar escribía a medida que iba produciendo el cuento, en cambio, Borges, ya lo tenía totalmente pensado. No sé cuál será la mejor manera para afrontar una narración, pero así cómo hay infinidades de formas de presentarlo, hay infinidades de personalidades para componerlo, revisarlo y leerlo. Ahora ya no se trataba de un simple “introducción, nudo y desenlace” sino que encerraba montones de cosas que hacían a la narración. Me explico: la forma en que era contada la hacían más o menos entretenida y recién en el final uno podía descubrir la historia secreta, es decir, la narración toma sentido en el final.
Este es un fragmento de uno de mis cuentos preferidos:
" Cuando siento que voy a vomitar un conejito me pongo dos dedos en la boca como una pinza abierta, y espero a sentir en la garganta la pelusa tibia que sube como una efervescencia de sal de frutas. Todo es veloz e higiénico, transcurre en un brevísimo instante. Saco los dedos de la boca, y en ellos traigo sujeto por las orejas a un conejito blanco. El conejito parece contento, es un conejito normal y perfecto, sólo que muy pequeño, pequeño como un conejilo de chocolate pero blanco y enteramente un conejito. Me lo pongo en la palma de la mano, le alzo la pelusa con una caricia de los dedos, el conejito parece satisfecho de haber nacido y bulle y pega el hocico contra mi piel, moviéndolo con esa trituración silenciosa y cosquilleante del hocico de un conejo contra la piel de una mano. Busca de comer y entonces yo (hablo de cuando esto ocurría en mi casa de las afueras) lo saco conmigo al balcón y lo pongo en la gran maceta donde crece el trébol que a propósito he sembrado. El conejito alza del todo sus orejas, envuelve un trébol tierno con un veloz molinete del hocico, y yo sé que puedo dejarlo e irme, continuar por un tiempo una vida no distinta a la de tantos que compran sus conejos en las granjas. "
Carta a una señorita en París
Julio Cortázar
Me acuerdo que había leído que Cortázar escribía a medida que iba produciendo el cuento, en cambio, Borges, ya lo tenía totalmente pensado. No sé cuál será la mejor manera para afrontar una narración, pero así cómo hay infinidades de formas de presentarlo, hay infinidades de personalidades para componerlo, revisarlo y leerlo. Ahora ya no se trataba de un simple “introducción, nudo y desenlace” sino que encerraba montones de cosas que hacían a la narración. Me explico: la forma en que era contada la hacían más o menos entretenida y recién en el final uno podía descubrir la historia secreta, es decir, la narración toma sentido en el final.
Este es un fragmento de uno de mis cuentos preferidos:
" Cuando siento que voy a vomitar un conejito me pongo dos dedos en la boca como una pinza abierta, y espero a sentir en la garganta la pelusa tibia que sube como una efervescencia de sal de frutas. Todo es veloz e higiénico, transcurre en un brevísimo instante. Saco los dedos de la boca, y en ellos traigo sujeto por las orejas a un conejito blanco. El conejito parece contento, es un conejito normal y perfecto, sólo que muy pequeño, pequeño como un conejilo de chocolate pero blanco y enteramente un conejito. Me lo pongo en la palma de la mano, le alzo la pelusa con una caricia de los dedos, el conejito parece satisfecho de haber nacido y bulle y pega el hocico contra mi piel, moviéndolo con esa trituración silenciosa y cosquilleante del hocico de un conejo contra la piel de una mano. Busca de comer y entonces yo (hablo de cuando esto ocurría en mi casa de las afueras) lo saco conmigo al balcón y lo pongo en la gran maceta donde crece el trébol que a propósito he sembrado. El conejito alza del todo sus orejas, envuelve un trébol tierno con un veloz molinete del hocico, y yo sé que puedo dejarlo e irme, continuar por un tiempo una vida no distinta a la de tantos que compran sus conejos en las granjas. "
Carta a una señorita en París
Julio Cortázar
Reflexión sobre el género
Desde los albores de la humanidad el relato constituía la única manera de transmitir el conocimiento Según Alvarado y Yeannoteguy la narración organiza el conocimiento y siempre dejaba una enseñanza en las personas, entonces también actuaba como moralizador de los pueblos. En el contenido del texto todo tiene una función, es decir, las situaciones que atravesaban los personajes no eran azarosas, cada cosa que pasaba, pasaba por una razón.
Siguiendo a estas autoras, en todo tipo de cuento se hace un pacto ficcional, el lector sabe que está en frente de hechos imaginarios pero no son mentiras. Este género tiene esa particularidad, que los hechos, en algunos casos, puedan identificarse con la realidad del autor.
Según Benjamin, se trata de intercambiar experiencias. Es lo que hacen las personas todo el tiempo, me arriesgo a decir, su rasgo característica principal, la de narrar anécdotas y experiencias. La narración genera preguntas, incomoda al lector, y cada uno agregará a la historia secreta que sugiere Ricardo Piglia su propia interpretación, es lo que advertí en los blogs de los compañeros. La historia 2 genera sorpresa y reflexión pero que recién se alcanza al final y, en su desarrollo ya se va “sospechando”, y el autor va creando climas de tensión para que el lector concluya en descubrir la historia oculta. Dependiendo de cada autor, en el final creo que siempre queda como algo vacío, algo que queda por concluir y es ese vacío el que nos da la pauta de la existencia de la hitoria 2.
Siguiendo a Benjamin, el cuento “Sabe consejos, pero no para algunos casos como el proverbio, sino para muchos, como el sabio. Y ello porque le está dado recurrir a toda una vida. De la propia y ajena. El narrador es la figura en la que el justo se encuentra consigo mismo”. En definitiva, este género está abierto a experimentar junto con otros para generar en el lector una "molestia", que éste le de sus propias interpretaciones y que, en un punto, pueda indentificarse y sacar moralejas para su propia vida.
Siguiendo a estas autoras, en todo tipo de cuento se hace un pacto ficcional, el lector sabe que está en frente de hechos imaginarios pero no son mentiras. Este género tiene esa particularidad, que los hechos, en algunos casos, puedan identificarse con la realidad del autor.
Según Benjamin, se trata de intercambiar experiencias. Es lo que hacen las personas todo el tiempo, me arriesgo a decir, su rasgo característica principal, la de narrar anécdotas y experiencias. La narración genera preguntas, incomoda al lector, y cada uno agregará a la historia secreta que sugiere Ricardo Piglia su propia interpretación, es lo que advertí en los blogs de los compañeros. La historia 2 genera sorpresa y reflexión pero que recién se alcanza al final y, en su desarrollo ya se va “sospechando”, y el autor va creando climas de tensión para que el lector concluya en descubrir la historia oculta. Dependiendo de cada autor, en el final creo que siempre queda como algo vacío, algo que queda por concluir y es ese vacío el que nos da la pauta de la existencia de la hitoria 2.
Siguiendo a Benjamin, el cuento “Sabe consejos, pero no para algunos casos como el proverbio, sino para muchos, como el sabio. Y ello porque le está dado recurrir a toda una vida. De la propia y ajena. El narrador es la figura en la que el justo se encuentra consigo mismo”. En definitiva, este género está abierto a experimentar junto con otros para generar en el lector una "molestia", que éste le de sus propias interpretaciones y que, en un punto, pueda indentificarse y sacar moralejas para su propia vida.
sábado, 14 de junio de 2008
Hasta las manos (de Filippi)
son el caos, paranoiquean,
te persiguen si sos puto, te persiguen si sos pobre,
te persiguen si fumás, si tomás si vendés,
si fumas, si compras un pobre tonto para hacer para comer, si tomás vendés, comprás , fumás y
vayanse todos a la concha de su madre
en la selva se escuchan tirosson las armas de los pobres,
son los gritos del latino...
ellos tienen el poder y lo van a perder...
en la selva se escuchan tirosson las armas de los pobres,
son los gritos del latino...
OTRA VEZ?!
EN QUE AÑO ESTAMOS?!
te persiguen si sos puto, te persiguen si sos pobre,
te persiguen si fumás, si tomás si vendés,
si fumas, si compras un pobre tonto para hacer para comer, si tomás vendés, comprás , fumás y
vayanse todos a la concha de su madre
en la selva se escuchan tirosson las armas de los pobres,
son los gritos del latino...
ellos tienen el poder y lo van a perder...
en la selva se escuchan tirosson las armas de los pobres,
son los gritos del latino...
OTRA VEZ?!
EN QUE AÑO ESTAMOS?!
Sí al dolor
Sábado. Temprano en la mañana. Habla por teléfono y saca un turno. Desayuna, se baña, hace tiempo y sale a tomar el colectivo. Mientas lo espera fuma un cigarrillo. Ella nunca fuma a la mañana. Las manos le tiemblan. Nunca hizo lo que va a hacer. Toma el colectivo y ocupa el primer asiento que ve. Viaja 15 minutos. Se baja y camina al encuentro de lo desconocido. Sabe que va a sufrir pero continúa caminando. Entra al lugar. “¿Tenías turno?” le dice una señora. “Sí” responde y se acomoda en un silloncito. “Ya te atendemos, lo que pasa es que es sábado y viene más gente”. “No hay problema, yo espero”. Y espera.
Se escuchan ruidos que vienen de detrás de las cortinas. Zack! Golpe fugaz. Casi indoloro. Casi. La espera dura 30 minutos. Ve lámparas que intentan generar un estado de calma. Las miradas temblorosas de las otras chicas que también esperan sienten lo mismo que ella. “Pasá por acá”. “Está bien”. Pasa la cortina y la cierra. Se acuesta en una camilla muy usada boca arriba., semidesnuda. La luz le quema los ojos y los cierra. Siempre es mejor cerrarlos. Siente un olor que nunca había sentido antes, y siente como ese olor proviene de un tarro y escucha que revuelven el contenido. Escucha como golpea la cuchara con los bordes del tarro. Espera. Espera. Se incomoda. Quiere irse pero se queda. Piensa que lo hace para sorprender a su pareja. Espera. “Ahí vamos”. “Mmmm”. “Respirá profundo”. Zack! “¡Auch!” “Respirá profundo” Zack! “Auch!”“¿Falta mucho?” “Ja ja recién empezamos, todavía falta lo primordial”. “Mmmm”. Siente dolor durante minutos interminables. Todavía cree que los siente. Y las palabras salvadoras por fin llegan “Hemos concluido. Mirate, está hermosa”. “Es verdad, tal vez vuelva”, piensa. “Me siento más libre”, vuelve a pensar. “Gracias, muchas gracias”, le dice a la señora con una sonrisa. Se viste y sale atravesando la cortina. “¿Cuánto es?”. “Pelvis completa y tira de cola, $21”.
(Texto narrativo a partir de memoria de un espacio.)
Se escuchan ruidos que vienen de detrás de las cortinas. Zack! Golpe fugaz. Casi indoloro. Casi. La espera dura 30 minutos. Ve lámparas que intentan generar un estado de calma. Las miradas temblorosas de las otras chicas que también esperan sienten lo mismo que ella. “Pasá por acá”. “Está bien”. Pasa la cortina y la cierra. Se acuesta en una camilla muy usada boca arriba., semidesnuda. La luz le quema los ojos y los cierra. Siempre es mejor cerrarlos. Siente un olor que nunca había sentido antes, y siente como ese olor proviene de un tarro y escucha que revuelven el contenido. Escucha como golpea la cuchara con los bordes del tarro. Espera. Espera. Se incomoda. Quiere irse pero se queda. Piensa que lo hace para sorprender a su pareja. Espera. “Ahí vamos”. “Mmmm”. “Respirá profundo”. Zack! “¡Auch!” “Respirá profundo” Zack! “Auch!”“¿Falta mucho?” “Ja ja recién empezamos, todavía falta lo primordial”. “Mmmm”. Siente dolor durante minutos interminables. Todavía cree que los siente. Y las palabras salvadoras por fin llegan “Hemos concluido. Mirate, está hermosa”. “Es verdad, tal vez vuelva”, piensa. “Me siento más libre”, vuelve a pensar. “Gracias, muchas gracias”, le dice a la señora con una sonrisa. Se viste y sale atravesando la cortina. “¿Cuánto es?”. “Pelvis completa y tira de cola, $21”.
(Texto narrativo a partir de memoria de un espacio.)
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